martes, 10 de julio de 2012

Conquistadores Castañeda


EXPLORADORES Y CONQUISTADORES
CASTAÑEDA



JUAN DE CASTAÑEDA



Exploración centroamericana 

La conquista de Costa Rica comprende los hechos ocurridos desde la llegada de Cristóbal Colón en 1502, hasta el dominio total del Valle Central por parte de los españoles.
El primer español que lo intenta fue Diego de Nicuesa, quien tuvo que regresar a España luego de haber fracasado debido varios obstáculos.
Luego se descubre el océano Pacífico y años después se funda la ciudad de Panamá, desde donde se organiza el grueso de las empresas de exploración de la costa pacífica.

El 25 de septiembre de 1502, en su cuarto viaje, Cristóbal Colon descubre a Costa Rica, pero tardo muchos años en enviar tropas a incursionar dentro del territorio costarricense.

 Vasco Núñez de Balboa, en 1513 después de romper relaciones con los reyes católicos atravesó el istmo y descubrió el Océano Pacífico, llamado mar del Sur, en 1515 Gaspar de Morales descubrió el Archipiélago de las Perlas, con estas expediciones se inició la etapa de reconocimiento de los litorales.



Juan de Castañeda y Hernán Ponce de León, en 1519 quienes ya habían tomado la isla de Puerto Rico, inician la conquista de Costa Rica.

El Teniente de Pedrerías Dávila, gobernador de Castilla de Oro y fundador de la ciudad de Panamá; que junto con Gaspar de Espinoza emprenden la primera expedición con 115 hombres, los que partieron desde Panamá rumbo a las costas centroamericanas, dirigidos por Juan de Castañeda, en los navíos que Balboa había construido en el Pacifico.

En Agosto de 1.519 siguiendo el litoral occidental  Los navíos venían en mal estado por lo que Gaspar de Espinoza navega hacia el poniente desembarcando a la altura de punta Barica, avanzando hasta llegar a la fértil tierra de Nata, mientras que los tenientes Juan de Castañeda y Hernán Ponce de León continúan la expedición, con 40 hombres navegan hacia el Oeste donde descubren la península de Osa, el golfo Dulce y finalmente el golfo de Nicoya donde tuvieron que enfrentar una gran resistencia, apresando allí a cuatro indígenas con el fin de emplearlos como intérpretes, lo que según indicios permitió la riqueza de información la que derivo en la conquista de la región. Los expedicionarios se encontraron con grandes corrientes que les impidió seguir adelante, regresándose sin más a Panamá.




Juan de Castañeda y Hernán Ponce de León descubren el Golfo Dulce y el de Nicoya; El español Fernández de Oviedo que bautizó con el nombre de Nicoya una parte de la actual provincia de Guanacaste, hace referencia a la expedición de la siguiente manera:

"Anduvieron más de cincuenta leguas la costa abajo, y hallaron un golfo de más de 20 leguas lleno de islas, y es puerto cerrado admirable; llámanlo los indios Chira, y ellos lo llamaron San Lúcar; éste es el puerto que dicen de Nicoya, que es una provincia muy fértil y graciosa . Allí cercan los navíos gran número de canoas, llenas de gente armada, y otra mucha gente que apareció en la costa con sus trompetillas o cornetas haciendo grandes fieros y amenazas; pero tirados algunos tiros de pólvora, no quedó hombre en el mar ni en la tierra que huyendo no volase. Viendo Hernán Ponce que por allí no podía ganar nada y que la costa iba adelante, tornóse a juntarse con Espinosa, el cual, o era ya ido para Darién o alcanzándole, lo dejó por mandato de Pedrarias en Panamá"

Respecto a esta expedición hay que tener en cuenta dos aspectos, uno de tipo legal y el otro práctico. En primer lugar, mencionar que a pesar de que Pedrarias Dávila fue el artífice de dicha expedición, no contaba con la autoridad para organizarla puesto que este derecho residía en manos de su yerno Balboa, aunque una vez decapitado en Acla, Pedrarias siguió con su política de descubrimientos. En segundo lugar, hay que considerar que se capturaron a varios indios con la finalidad de enseñarles la lengua castellana y así poder desarrollar tareas de intérpretes y obtener información sobre los territorios únicamente avistados.





Las primeras incursiones en la Gran Nicoya fueron viajes de exploración que partieron de las fundaciones españolas en Tierra Firme, en particular desde Ciudad de Panamá, con la finalidad de confirmar la existencia de riquezas abundantes, que justificasen la continuidad de la empresa, es decir, la posterior conquista y colonización; y la búsqueda de un paso intercontinental hacia Oriente impulsada por la Corona, hecho que a partir del "descubrimiento" de la Mar del Sur por Vasco Núñez de Balboa en 1513, abrió dos vías de reconocimiento y posterior expansión, la primera hacia el oeste (Nicaragua) y, la segunda hacia el sur (Perú).

Pero para explorar nuevos territorios se necesitaban embarcaciones más grandes. Esta necesidad fue tal vez una de las causas del asesinato de Vasco Núñez de Balboa (R. Fernández Guardia, 1941: 38-39).

Embarcaciones que habían sido construidas bajo el mando y con los recursos de Juan de Castañeda, quien era un experimentado marinero y tal vez esas cualidades lo salvaron de la muerte a manos de Pedrarias Dávila, junto con sus otros amigos.

Información de los méritos y servicios de Juan de Castañeda, fue uno de los primeros conquistadores de Tierra Firme. Descubrimiento del Mar del Sur en la provincia de Nicaragua, el golfo de Sanlúcar y cabo de Buena Esperanza.

Teniente gobernador, Capitán, piloto experimentado, gobernador, visitador, alcalde y regidor.

Probablemente nació cerca de finales del siglo XV, quien murió hacia la segunda mitad del siglo XVI; de los anteriores hechos no se conocen sus respectivos lugares.

Acompañó a Alonso de Ojeda, junto con otros experimentados hombres de mar, tales como Vasco Núñez de Balboa, Ponce de León y Francisco Pizarro, quienes años después adquirieron renombre por sus hazañas.

Los méritos de estos descubrimientos no fueron reconocidos de inmediato y tras la sustitución de Pedrarias Dávila, la hazaña quedó en el olvido.

Juan de Castañeda se encuentra nuevamente, como residente, en la ciudad de Castilla de Oro en septiembre de 1528, en donde eleva solicitud de investigación de méritos, para ser reconocidos económicamente por la Corona. Presenta como testigo a las autoridades locales al capitán Juan Tello, al maestre Bartolomé, a Diego Pérez y a Juan Camacho, agrega como testigos al capitán Juan de Cárdenas, Toribio de Lara y Juan Velásquez como vecinos y regidores de la ciudad.



Señala ser hidalgo, alcalde y visitador de los caciques e indios de la provincia de Panamá y de tener entre diecisiete y dieciocho años de estar sirviendo a la Corona en esa zona. Señala ser el primero que descubrió la Mar del Sur, siendo el capitán y piloto de los navíos que navegaron en dicho mar. Fue una de las personas que fundaron y poblaron las ciudades de Santa María de la Antigua del Darién, de Acla y de Panamá, en otras de las argumentaciones indica que, pese a estar casado, su esposa permanece en España, en donde ha hecho diligencia para traerla en cuatro ocasiones.

Pese a ello mantiene casa con numerosos pobladores, con elevados costos de manutención, ya que dio hospedaje a las personas que trajo consigo el gobernador Pedro de los Ríos (L. Fernández, 1907; VI: 49-68).


PEDRO CASTAÑEDA DE NAJERA
EXPLORADOR.

PEDRO CASTAÑEDA DE NAJERA


Miembro y cronista de la expedición de Coronado era natural de Nájera, un pueblo en el estado de Vizcaya en el norte de España. En el momento de la organización de la expedición de Coronado, Castañeda se encontraba en un puesto avanzado de español en Culiacán, en el noroeste de México. Estaba casado y tenía al menos ocho hijos.

Francisco Vázquez de Coronado en 1541 y su fuerza de más de 1.300 soldados españoles y aliados indígenas conquistaron a los indios Zuni en el noroeste de Nuevo México. Buscando en vano las legendarias Siete Ciudades de Oro, Coronado interrogaron a los Zunis sobre "las provincias que cayó cerca de sus fronteras." El Zunis le habló de Tusayan, "una provincia de los siete pueblos similares a los suyos."



Coronado ordenó a don Pedro de Tovar para investigar, Tovar y otros 20 hacia el oeste a través del desierto alto de la meseta de Colorado, entrando en "el país [Tusayan], tan secreto que no se fijó en un hombre como llegaron." Casi se puede oír los sonidos apagados de los caballos como el partido se escondieron en un barranco debajo de uno de "muchos pisos" Tusayan los pueblos.
Por la mañana Los españoles "fueron descubiertos." El pueblo "de esa tierra se ponen en orden, marchando bien armados con arcos y escudos y porras de madera, en el expediente, sin romper la línea. “Indios hopi del norte de Arizona.



Vázquez de Coronado entregó los cargos más importantes de la expedición a gente muy conocida en la capital del virreinato maestre de campo nombró a Lope de Samaniego, que había sido alcalde de las atarazanas de la ciudad de México; por teniente general designó a Tristán de Luna y Arellano, antiguo capitán de la jornada a la Florida; como uno de sus capitanes nombró a Melchor Díaz, alcalde mayor de Culiacán; otros cargos de menor importancia los entregó a Diego de Barrionuevo, Garci López de Cárdenas, Pedro de Tovar, Diego de Guevara, Rodrigo Maldonado, Juan de Saldívar y Pablo de Melgosa. Juan de Jaramillo. Pedro Castañeda de Nájera que destacaron no sólo por sus habilidades militares, sino también porque dejaron testimonio sobre esta expedición.
 El primero, llamado El Mozo, escribió la Relación hecha por el capitán Juan de Jaramillo de la jornada que había hecho a tierra nueva en la Nueva España y al descubrimiento de Cíbola, yendo con el general Francisco Vázquez de Coronado, la relación de la jornada de Cíbola compuesta por Pedro de Castañeda de Nájera donde trata de todos aquellos poblados y ritos y costumbres la cual fue el año de 1540.

Acompañaron la expedición los franciscanos Juan de Padilla, Marcos de Niza, Juan de la Cruz y Antonio de Vitoria (encargado de los oficios de la misa) y el lego Luis de Escalona.

La empresa de exploración que dirigió Vázquez de Coronado fue, ante todo, un trabajo de equipo, que sin la colaboración material y financiera de los capitanes y soldados no hubiera sido posible llevar a cabo.



El viaje a Cíbola tuvo como primer objetivo el reconocimiento de la tierra llana y espaciosa, apenas andada por fray Marcos de Niza, seguido por el interés de acrecentar las provincias, las villas, los tributos y los vasallos de la Corona. 

Como consecuencia de las noticias acerca de Aztlán que Cabeza de Vaca difundiera en la Nueva España, se iniciaron varias expediciones en busca de las siete ciudades, de Cíbola y de Quivira. Uno de los tres compañeros de Cabeza de Vaca, el negro Estebanico, sirvió de guía a fray Marcos de Niza, quien en 1539 emprendió un viaje hacia el norte. En su relación al virrey Antonio de Mendoza, fray Marcos dice: 
«En esta primera provincia hay siete ciudades muy grandes, todas debajo de un señor, y las casas de piedra y cal, grandes y las portadas de las casas principales muchas labradas de piedras turquesas Ese relato maravilloso de fray Marcos motivó el viaje.


CONQUISTADOR CORONADO


Francisco Vázquez de Coronado, cronista Pedro Castañeda de Nájera, escribió una Relación de la jornada a Cíbola (1540). En sus relatos, tanto fray Marcos como, Castañeda de Nájera nos han dejado testimonios de la vida en el norte. 
La exploración de dicho territorio
por parte de los mismos españoles fue amplia y Exhaustiva, desde Virginia hasta California, pasando por las Carolinas, Georgia, Tennessee, Arkansas y la Florida, hasta llegar a Texas, Nuevo México, Arizona, Colorado, Utah y Oregón; y que este proceso de colonización y exploración tiene lugar de manera Ininterrumpida, quienes con una imaginación Medieval buscaron afanosamente las Siete Ciudades de Oro a lo largo y ancho del territorio estadounidense. Eso, al menos, es el lado español de la historia. Fue escrito por Pedro de Castañeda de Nájera, dos décadas después del encuentro. Castañeda era un soldado en la expedición de Coronado, pero que no acompañó a Tovar. Su relato es de segunda mano, después de los hechos- extraídos de la memoria, pero es todo lo que tenemos. Al menos sobre el papel.



Las hazañas igualan a los «caballeros» indios y españoles en el ejercicio de las armas; ahora, estos hechos reclaman la admiración del virrey Mendoza quien trata a los españoles de acuerdo, no con el rango sino reconociendo su conducta heroica. En consonancia con esta postura, el narrador destaca cómo el gobernante se deleita escuchando el relato de la destreza, ferocidad y buena disposición de los floridanos tanto como de los españoles.

Todo ello permite al narrador a situar al virrey en dos categorías: Entre quienes son capaces de mirar al menos con curiosidad y hasta con cierta admiración, a la otredad americana; entre los europeos interesados en las noticias de América, en particular si éstas atañen a tierras inexploradas y cuantiosos tesoros. En cuanto a lo segundo, conviene recordar que la documentación histórica confirma que el virrey Antonio de Mendoza envió a fray Marcos de Niza y a Esteban (1539), el esclavo del norte de África sobreviviente de otra fallida.



Expedición floridana -la de Pánfilo de Narváez, en busca de las legendarias «siete ciudades de Cíbola». Esteban murió en la empresa, pero fray Marcos confirmó la existencia de las doradas ciudades. El Inca Garcilaso (F, Libro 6, capítulo 18, 433) y los archivos igualmente indican que, en seguimiento de estas legendarias urbes, el gobernante envió después (1540) una expedición por mar y tierra, capitaneada esta última por Francisco Vázquez de Coronado, gobernador de la Nueva Galicia. Un año más tarde éste regresó con las manos vacías de tesoro, pero repletas de acusaciones por su maltrato a la población indígena y a otros expedicionarios como consta en la relación (1560-65) de Pedro Castañeda Nájera, uno de los participantes.


RODRIGO DE

 CASTAÑEDA

CONQUISTADOR


Conquistador de Nueva España

Castañeda Rodrigo de padres: Juan de Castañeda y Leonor Díaz de Zaballos.

Cortés lo acusó de querer preservar los ídolos de los templos nativos en sus

Propiedades en desafío de los franciscanos. Casado con Ana de León.

tuvo 6 hijos y 2 hijas.

Nietos: don Alonso de Carvajal, Agustín y Alonso de Castañeda.  
No había registro de un nieto mestizo por el nombre de Zicotencatl Castañeda.
Una nieta caso con Juan de Avedaño.

Rodrigo de Castañeda conquistador de la Nueva España, vino con Cortés, fue
valiente y atrevido en la paz y la guerra, primero en la toma de la Ciudad de México y luego en Panuco, Zapotecas, y Guatemala, lo llamaron Xicoténcatl, 



Cortés en 1524 envió a Gonzalo de Sandoval a efectuar una entrada en los valles de Oxitipa, con el objeto de someter nuevamente esta región. Bajo su mando llevó a Pedro Vallejo, Pedro Martín Aguado, Rodrigo de Castañeda, 50 hombres de a caballo, 100 peones, 15 000 acolhuas a las órdenes de Yoyotzin, hermano menor de Ixtlilxóchitl, y otros 15 000 mexicanos al mando de un sobrino de Cuauhtémoc; Para escarmentar a los huastecos por su alzamiento, apresando cerca de 400 señores o caciques en el pueblo de Xatxapala (hoy en Veracruz).

En el año de 1522 subyugaba la zona sur oeste de Cuernavaca.
En el año 1529 Rodrigo de Castañeda realiza una expedición en la zona minera de Taxco donde funda.Taxco de Alarcón  sobre el terreno de una población indígena llamada "Tlashco"

En 1530, vivía en la ciudad de México, ahí sirvió como interprete de la primera Audiencia.

En  1531 Rodrigo de Castañeda pacificò la región taxqueña, con el conquistador Miguel Díaz de Aux.

Antes de venir con Hernán Cortes a México vivió 5 años en Santo Domingo, (Republica Dominicana) 
En  1532, en la segunda Audiencia le fue encomendado el pueblo de Puctla. 
Murió cerca de 1560. Lo heredo un hijo del mismo nombre.

Armas que el Emperador Don Carlos V 

concedió al conquistador de Indias, Rodrigo de Castañeda

Vecino de Tenustitán (México), para él y sus sucesores en Burgos, el 20 de Diciembre de 1527,

Escudo cuartelado:

1.º, en campo de oro, un águila de sable; 2.º, en campo de gules, un castillo de oro; 3.º, en campo de gules, un montículo o peñasco de sinople sumado de una cruz de oro, y una fuente al natural manando al pie del peñasco, y 4.º, en campo de azur, un león rampante de oro. Bordura de sinople, cuatro manos de carnación empuñando una cruz de oro, puestas dos en cada flanco, y dos cabezas de hombre al natural puestas una en el centro de la parte superior de la bordura y otra en la punta.


Este documento es una orden 
del primer virrey de la Nueva España.

Antonio de Mendoza, al conquistador Rodrigo de Castañeda, prohibiéndole que entrara en el pueblo de Cosamaloapan por indígenas para llevárselos al pueblo que tenía encomendado.

Era frecuente, que por diversos motivos los indígenas de un pueblo se mudasen a otro (epidemias, injusticia en el pago a los encomenderos, etc.), por lo que el encomendero viendo sus ingresos disminuidos los buscaba y traía a la fuerza a su lugar de origen. Esto es lo que refleja el documento, aquí reproducido, en este caso, defendidos por el gobierno virreinal,en base a otros documentos históricos se sabe que el nombre del pueblo era Puctla. En un documento de 1554, se escribe como Pacutla. El texto trata de reproducir las mismas letras del texto original, solo en aquellos casos de abreviaturas de puso la palabra completa.

Fragmento del texto de 1542. 

Virrey Antonio de Mendoza

A pedimento de los yndios de Cuçamaluapa (Cosamaloapan) qontra Castañeda.

Yo don Antonio de Mendoça (Antonio de Mendoza) hago saber a vos Rodrigo de Castañeda que los yndios de Cuçamaluapa (Cosamaloapan) me an hecho relacion que vos ¿sosacar? de cierta provysyon o (…a..) despacho myo / aveys ydo o enviado al dho pueblo a sacar e susasacar los yndios que en el estan / y los aveys traydo e traeys al pueblo de put..cutla (Puctla) que teneys en encomienda por fuerça e qontra su voluntad de lo qual an recibido e rreciben / mucho agravyo e sy no se rremedyase el dicho pueblo se despoblaria e por mi vysto para el rremedio de ello / mande dar este mandamyento que (por el qual mando) syntencia mya / dada e ¿aunque? oyda despues de la fecha deste no entreys en el dho pueblo de cucamaluapa, ny enbieys persona alguna a el a sacar / ny sosacar nyngunos yndios que en el dicho pueblo estuvieren e libremente / los dexeis estar en el so pena de cien pesos de oro para la camara de su majestad en los quales os doy por condenado fecho en Mexico a V dias del mes de octubre de 1542 años don Antonio de Mendoça, por mandado de su señoria, Antonio de Turcios.


 Armas de Rodrigo de Castañeda

 

 


CONQUISTADOR GREGORIO DE CASTAÑEDA


GREGORIO DE CASTAÑEDA.


Fue un militar y conquistador español, gobernador de Tucumán entre 1561 y 1563. Llegó a Chile en diciembre de 1543 en el refuerzo de tropas que traía el capitán Alonso de Monroy, tenía el rango de alférez. Tras cuatro años en ese país, regresó a Perú, en la misma fragata que iban los acusadores de Pedro de Valdivia. En el proceso que se formó contra el conquistador de Chile, Castañeda declaró a su favor, y esa declaración contribuyó a que Valdivia fuese absuelto.

Larga fue la contienda entre los capitanes procedente del Perú y los de Chile. Sucedió muchas veces que estos últimos renegasen de su origen y aceptasen la jurisdicción de Charcas, como lo hizo el general Juan Pérez de Zurita, uno de los más ilustres hombres de su tiempo. Vino contra él Gregorio de Castañeda; lo prendió y lo remitió al otro lado de los Andes. Llevado el pleito, por éste y por otros territorios, al conocimiento de la Corte, informó el Consejo de Indias y se expidió al fin la Real Cédula del 20 de agosto de 1563 en la que se declaró que todos los territorios que quedaban al oriente del cordón central de la Cordillera pertenecían a la gobernación del Tucumán; por lo cual las autoridades de Chile debían abstenerse de entrar en ellas. Esta cédula tiene grande importancia actual  cuestión de límites con Chile.
Francisco Villagra antes de partir a Chile a principios de 1561 había designado al capitán Gregorio de Castañeda para que fuese a hacerse cargo del gobierno del Tucumán y reemplazase a Juan Pérez de Zurita.




Gregorio de Castañeda funda la primera ciudad jujeña el 20 de agosto de 1561, llamada Nieva, en homenaje al virrey del Perú. En muy precarias condiciones subsistió el escaso poblado hasta 1563, en la rebelión de los calchaquíes. También decide no solo cambiar el nombre de Londres por Nuevo Extremo, sino que la traslada al valle de Conando, donde actualmente es la ciudad de Andalgalá.
Castañeda se dio a tales atentados y violencias contra los Calchaquís, arrebatándolos para el servicio de Encomiendas y minas, ni más ni menos que como lo hacían los del Paraguay, que las masas de esta parcialidad, unidas a los Thia-kuitas y a los Juries, se levantaron en armas. Desaparecieron de la faz de la tierra las poblaciones principales de Cañete, Córdoba de Calchaquí, Londres, Nieva, y otras; a término que las jurisdicciones de la Rioja, Catamarca, Salta y Humahuacae quedaron literalmente arrasadas y cubiertas de escombros hasta que el gobernador del reino mandó sacar de Tucumán a Castañeda, y repuso en el mando a Francisco de Aguirre, no ya como dependiente de Chile, sino como funcionario del Perú de acuerdo con la Real Cédula.




BATALLA DE ANDALIEN

Ocurrida en el valle de Andalién el 22 de febrero de 1550 entre las fuerzas españolas de Pedro de Valdivia y las mapuches compuestas por doscientos españoles secundados por indios auxiliares al mando de Michimalonco, en número de 1.500 combatientes quien ahora servía a los españoles y a las fuerzas araucanas.

Valdivia viendo que perdían y para animar a los que peleaban a pie, mandó se apeasen algunos de los hombres principales ya estos, arriba de los caballos no podía pelear como querían. Luego se apeó Francisco de Riberos, y Gregorio de Castañeda, hombres valientes y conocidos; Viéndolos apearse se apearon muchos otros con sus lanzas, adargas y algunos arcabuces que poco les ayudaron.

Valdivia mandó que acometieran los soldados por las espaldas; aunque los indios estaban divididos en tres grandes escuadrones no pudieron atacar más que por un lado a causa de las lagunas en que se apoyaba la hueste de Valdivia, esta circunstancia le permitió batirse en un solo frente.

Viniendo contra ellos unos 20 mil indios, con tan gran ímpetu y alarido que parecían hundir la tierra y comenzaron a pelear de tal manera y tesón jamás visto en otras batallas como la de estos indios mapuches a los que apenas lograron rechazar por el uso de armaduras, armas de fuego, caballos; los que gracias a sus avanzadas armas pudieron salir victoriosos.



MUERTE DE FRANCISCO DE VILLAGRA 

El conquistador español. En 1537 marchó a América, donde participó en las luchas contra chiguanos y chunchos y en la campaña de Arauco. Fue regidor del Cabildo de Santiago (1541-1547), capitaneó una expedición al Perú y, tras la muerte de Valdivia, fue nombrado gobernador y capitán general de Chile, aunque Santiago y otras ciudades del Norte no le reconocieron. Pudo asumir el cargo en 1561 y durante su breve mandato renovó la guerra del Arauco. Años más tarde es nombrado oficialmente nuevo Gobernador de Chile, cargo que desempeñó por espacio de dos años.

Su gobierno se inició con mala estrella, ya que el barco en que vino trajo la viruela a Chile, provocando una desastrosa epidemia en, Valparaíso y Santiago, pero que también afectó con aún mayor gravedad a los mapuches, que perdieron entre la quinta y cuarta parte de su población; Organizó una nueva expedición, pero su cuerpo cansado de tantas batallas cayó irremediablemente enfermo, sufriendo importantes derrotas.

Los indios mantenían en estrecho sitio al Arauco, Francisco de Villagra, abrumado por los desastres de su gobierno y de su enfermedad, languidecía tristemente en Santiago. Las desdichas no dejaban de sucederse, y cada día llegaba a sus oídos una nueva que venía acelerar su fin.



Por último, los desastres sufridos por las armas españolas en Tucumán, dadas a conocer por Gregorio de Castañeda completaron el tristísimo cuadro con que el gobierno de Villagra se veía desaparecer

Tras la muerte de su hijo Pedro de Villagra el mozo, empeoró su condición mental y física.

Enfermo y abatido por la guerra sin cuartel que le hacen los araucanos, muere el,22 de julio de1563, y acorde a sus deseos, fue enterrado con el hábito franciscano.

La victoria de Peteroa, con la muerte de Lautaro, significaba para Villagra la culminación de sus campañas militares en Chile, ya que había salvado con ello la conquista.

A mediados de 1567, Castañeda, Sintiéndose impotente y con una situación militar y política insostenible, toma un barco rumbo a, Concepción, falleciendo en un naufragio.






CONQUISTADORES Y EXPLORADORES
DE APELLIDO CASTAÑEDA.



















Juan de Castañeda, nacido en Reinosa a principios del siglo XV, Capitán de la exploración de Panamá rumbo a las costas de Nicaragua en 1.519; participa

en la expedición hacia Argentina de Pedro Mendoza de 1536.

Rodrigo Castañeda Díaz de Ceballos, carredano de fines del siglo XV, pasó en a Nueva España con Hernán Cortés, fue conquistador de la Nueva España, Toma la Ciudad de México luego en Panuco, Zapotecas, la zona suroeste de Cuernavaca y Guatemala.

Alonso de Castañeda, del valle de Toranzo llega con Pánfilo Narváez a la Florida de donde vino al a Nueva España y fue con Nuño de Guzmán a la conquista de los Tevles Chichimeca.

Diego de Castañeda, natural de Salamanca pasa a Nueva España; Capitán que entra a la conquista de Michoacán y los Sipotecas , y funda la villa de las Segovias en 1.543

Pedro Castañeda de Nájera, cronista y expedicionario de Vásquez de Coronado de los territorios de Norteamérica en California, Nvo México, Arizona en busca de las siete (7) ciudades de oro. donde conquistan a los indios Zunis y Hopy.

Gregorio de Castañeda, fue un militar y conquistador español, gobernador de Tucumán entre 1561 y 1563. Llegó a Chile en diciembre de 1543 en el refuerzo de tropas que traía el capitán Alonso de Monroy, tenía el rango de alférez. Tras cuatro años en ese país, regresó a Perú, en la misma fragata que iban los acusadores de Pedro de Valdivia. En el proceso que se formó contra el conquistador de Chile, Castañeda declaró a su favor, y esa declaración contribuyó a que Valdivia fuese absuelto.

Fallece a mediados de 1567, rumbo a Chile en un naufragio.



CONQUISTADOR PEDRO DE VALDIVIA

Francisco Castañeda, Era casado al llegar a Chile, pero nada se sabe de su primera esposa. En segundas nupcias Caso con Francisca Bravo con quien tuvo descendencia.

Nace en Cuenca, España, en 1518 muere en Chile por 1580 de origen hidalgo se distingue en sus servicios, ayuda en la conquista del sur de Chile quien destaca en sus actos militares por lo que el Gobernador Pedro de Valdivia elogia a su persona.

Francisco Castañeda, conquistador y poblador, vino a Chile después deservir á SM en Quito el virrey Blasco Núñez de Vela el año de 1543. Seguramente participo en la batalla de la llanura de Iñaquito el año de 1546 entre las huestes de Gonzalo Pizarro y el Virrey Núñez de Vela, cuyos soldados sobrevivientes y leales al Virrey serian Ahorcados o desterrados a Chile.



Francisco de Castañeda participo en la conquista del sur de Chile, quien combate junto al Capitán Alvarado, en la batalla de Marihueñu el año de 1554 contra los indígenas Mapuches bajo el mando de Lautaro y otros toquis indígenas destacados del Arauco.

Francisco de Castañeda fue Regente de la Audiencia de Santiago de Chile, Alcalde de la ciudad de Concepción el año de 1555, y Tesorero Real de Hacienda en la ciudad de Valdivia en 1576, una vez llegado a Chile fue encomendero, en su encomienda se dedicó a la crianza de ganado donde trajo los primeros vacunos.








México Nueva España.

Lista de los que sirvieron con Cortés en la

Conquista.



Abascal, Pedro de
Abendaño, de Indigo
Abrego, Gonzalo de
Abrego, Gonzalo de
Acevedo, Bartolomé
Acevedo, Francisco
Acevedo, Luis
Adalama, Juan
Aguilar, Diego
Alamilla, Sebastián
Alaminos, Gonzalo de
Alanis, Alonso
Alanis, Pedro
Alarcón, Francisco de
Albacete, Benito
Albarca, Rodrigo
Alba, Juan de
Alberza,?
Alcántara, Juan de
Alderete, Julián de
Alduines, Alonso de
Alemany, Gaspar
Alfaro, Elías
Allende, Antonio de
Almesto, Juan de
Almodóvar, Álvaro
Almodóvar, Diego
Almodóvar, Juan
Almonte, Juan
Alonso, Andrés
Alonso, Luis
Roldán Alonso, Pedro
Alonso, Rodrigo
Alonso, Rui
Alonso, Ruy
Alonso, Hernando
Alonso Gamboa, Cristóbal
Altamirano, Juan
Alva, Lorenzo de
Alvarado, Francisco de
Alvarez, Juan
Chico Alvarez, Francisco
Galeote Álvarez, Juan
Álvarez de Espinoza, Alonso
Anaya, Pedro de
Ancielos, Joan de
Anguiano, Antonio
Añasco, Rodrigo de
Angulo y Garciano, Juan
Antón Martín
Aparicio, Juan de
Aparicio, Martín
Aragón, Hernando
Aragón, Juan
Aranda, Juan de
Archiaga,?
Arcos, Francisco de
Arcos, Gonzalo de
Arcos, Hernando de
Arcos, Juan de
Cervero Arcos, Gonzalo de
Arévalo, Antonio
Arévalo, Francisco
Arévalo, Luis de
Arévalo, Pedro
Argueta, Hernando
Arias, Antonio
Arias de Ávila, Gaspar
Arias de Sopuerta, Pedro
Arizavalo, Antonio
Armeno, Juan
Armenta, Pedro
Arpa, Pedro de
Arriaga, Juan de
Arroyo, Antonio
Arteaga, Domingo (2)
Aserrador, Clemente
Assia, Ochoa de
Asturiano, Alonso
Asturias, Pedro de
Avalano, Juan
Avalos, Melchor de
Avelica,?
Avesala, Hernando de
Ávila, Alonso de
Avila, Diego
Avila, Francisco de
Ávila, Sancho de
Avilés, Pedrarias de
Avo, Juan de
Axeces, Juan de
Ayamonte, Diego de
Ayllón,?
Azamar, Diego de
Azedo, Bartolomé
Bachiller, Martin
Bardales, Diego
Badillo, Rodrigo
Baena,?
Baena (Lores), Alonso
Báez, Martin
Báez, Rodrigo
Baeza, Diego de
Baeza, Pedro de
Balades,?
Baldelomar,?
Valdivia,?
Baldovinas,?
Ballestero, Juan
Balmaseda (Valmaseda), Pedro de
Bamba Cabeza de Vaca, Pedro
Bandadas,?
Bandoy, Juan de
Banegas (Vanegas), Cristóbal
Baptista (Bautista),?
Barahona, Martín de
Barcena, Pedro de
Barco, Pedro del
Barrientos, Alvaro
Baptista, Juan
Barrientos, Hernando de
Berlanga,?
Barrios, Cristóbal de
Barro, Juan
Basurto, Alonso de
Bautista, Juan
Bautista de Grimaldo, Juan
Bazán, Gonzalo
Becerra, Alonso
Becerra, Alvaro
Becerra, Andrés
Becerril, Santiago
Bejerano, Diego
Bellido, Alonso
Bellido, Juan
Bello, Alonso
Benavente, Cristóbal
Benavente, Pedro de
Benavides, Nicolás de
Benítez, Alonso
Benítez, Juan
Benítez, Sebastián
Benito?
Berganciano, Juan
Berganciano, Pedro
Bergara, Juan de
Bermúdez de Velasco, Beatriz
Bermúdez, Baltasar
Bernal, Cristóbal
Bernaldino,?
Berra, Pedro de
Berrío, Luis de
Berrío, Pedro de
Blanco, Hernando
Blanco, Juan
Blanco, Pedro
Blanes, Pedro
Blasco (Blanco), Pedro
Bocanegra,?
Bocanegra, Pedro de
Bocarez (Bacaraez), Pedro de
Bola, Martin
Bolees, Antonio
Bonar, Francisco de
Borges, Pedro
Borja, Antonio
Botello, Juan
Brabo, Cristóbal
Bretes, Gonzalo de
Bribiescas, García de
Brica, Joan de
Bueno, Alonso
Bueno, Juan
Bueno, Tomás
Burgos, Juan de
Burgos, Rodrigo de
Caballería,?
Caballero, Pedro
Caballos, Francisco de
Cabezas, Alonso
Cabeza de Vaca, Luis
Cabrera, Gabriel de
Cabrera, Hernando
Cabrera, Juan de
Cáceres, Jerónimo
Camargo, Diego de
Camacho, Pedro
Camargo, Toribio
Camino, Diego
Campanario, Sebastián
Campito (Campos?),?
Campo, Blas de
Campos, Andrés de
Campos, Bartolomé de
Cañamera, Juan García de
Canillas,?
Cano, Luis
Cantillana, Diego
Canto, Andrés del
Carabasa,?
Carabaza,?
Cárdenas, Luis de
Carmona, Antonio
Carpues, Santiago de
Carralero, Antonio
Carranza, Pedro de
Carretero, Juan de
Carrillo, Hernando
Carrillo, Juan
Carrión, Diego
Carrión, Ginés de
Carrión, Gregorio de
Carsenel, Alfonso
Cartagena, Juan de
Carteo, Andrés de
Carullola (Carniela),?
Turrencaos Carvajal, Antonio
Casamori, Gutierre de
Casas, Francisco de Las
Casco, Francisco
Cascorro,?
Castañeda, Diego de
Castañeda, Hernando de
Castañeda, Joan de
Castellano, Diego
Castellanos, Pedro
Castellón,?
Castillo, Antonio del
Castillo, Diego del
Castillo, Francisco
Castillo, Melchor de
Castrillo, Alonso de
Castro, Andrés
Castro, Francisco
Castro, Pedro
Castromorcho,?
Catalán, Anton
Cavras (Cabras), Bartolomé
Cayas (Zayas), Diego de
Centeno, Pedro
Cepeda, Gaspar de
Cerbera, Assensio
Cervantes, Francisco de
Clemente?
Colmenero, Juan Esteban
Comontes, Cristóbal de
Conellar Verdugo, Juan de
Conilien, Francisco
Corbera, Asencio
Cordero, Gregorio
Cordón, Antonio
Cordonel, Alonso
Coria, Bernardino de
Corral, Cristóbal del
Corral, Francisco
Corral, Juan del
Corrasco, Juan
Correa, Juan
Cortes de Mérida, Gonzalo
Cortés de San Buenaventura, Francisco
Cortés de Zúñiga, Alonso
Cosana, Pedro de
Coto (Soto),?
Cristobal de las Casas, Gil
Cruz, de Martin-la
Cuadras, Francisco de
Cuadras, Pedro de
Cubia (Zubia), Juan de
Cubiertas, Sebastián
Cubillas, Juan de
Cuellar, Francisco de
Cuenca, Antón de
Cuesta, la de Alonso
Cueto, Pedro de
Chacón, Gonzalo de
Chavelas, Francisco de
Chaves, Martín
Chaves: "El Vizcaino"
Chico, Pedro
Chinantla, Nicolás de
Dam, Joan
Dava, Lorenzo
Dávila, Rodrigo
Dávila (de Ávila), Juan
Daza (Daca) de Alconchel, Francisco
Delezcano, Xoan
Del Campo, Blas
Del Castellar, Pedro
Del Castillo, Francisco
Del Puerto, Martín
Destacio, Joan
De Losa, Juan
Delguerrero, Hernando
Díaz, Miguel
Peón Díaz, Diego
Galafate Díaz, Francisco
Díaz de Alcalá, Diego
Díaz de Araujo, Melchor
Díaz de Medina, Bernardino
Díaz de Peñalosa, Rui
Díaz de Sotomayor, Pedro
Díaz de la Reguera, Alonso
Diego, Maestre
Halcon Diego?
Diosdado, Antonio
Docampo,?
Domingo,?
Domínguez, Gonzalo
Domínguez Arias, Francisco
Donaire, Francisco
Doria, Cristóbal
Dueñas, Beatriz
Duero, Sebastián de
Duran, Alonso
Durán, Rodrigo
Eibar, Andrés de
Elgueta (Helgueta), Hernando de
Enamorado, Juan
Enríquez de Guzmán, Juan
Eraso, Juan de
Escalante, Pedro de
Escalona, Hernando de
Escalona, Pedro de
Escobar,?
Escobar, Alonso
Escobedo, Francisco de
Escobar, Rodrigo
Escudero, Juan
Espinal, Juan de
Espinar, Juan D '
Espinosa, García de
Espinosa, Gaspar de
Espinosa, Juan
Espinosa, Martín de
Espinosa, Rodrigo de
Esquivel, Juan de
Esteban?
Esteban, Miguel
Evia, Francisco de
 











  PLACAS CONMEMORATIVAS DE 1598  A LAS FAMILIAS
QUE FUERON EN LA EXPEDICION
  CON JUAN DE OÑATE




A la región de norte América, llega Juan de Oñate en 1598   a la cabeza de diferentes expedicionarios, algunos de los cuales llevaban a sus familias.

Encontrando el apellido Castañeda conforme quien los anoto, a don: Juan de Castañeda, cuyo origen se desconoce, y Francisco Martínez de la Castañeda, originario de Álava, España.


ESCUDO DE ARMAS DE HERNAN CORTES 

Los estudiosos estiman más de 2.200 conquistadores sirviendo a las órdenes de Cortés.





ESCUDO DE ARMAS DE PEDRO DE VALDIVIA 







El mapa de América tembló bajo los cascos de los caballos y las bruñidas e impactantes corazas, que, bajo las fauces de los terribles perros de caza, y una artillería nunca vista, despedazaban al enemigo bajo las cerradas descargas de arcabucería y las inmisericordes cruces que el mundo jamás vio.

Producto genuino de la guerra expansiva de los imperios europeos, representó un violento temblor para los pueblos de "América”, que desequilibró las relaciones entre naciones vecinas.

Poblado por seres humanos diferentes, de naturaleza distinta y asombroso carisma, que en hombres salvajes el mundo miró.

. El nuevo mundo “inocente” cayo, pero el mundo bárbaro y libre subió; Plasmados quedaron los hechos en el sórdido mundo del conquistador que, de penas, dolores y

guerra al mundo lleno.

El asedio de caciques que de las costas a la cordillera el orbe hinchó, los que buscaban de un gran sacrificio la tierra plagar, al final horrenda masacre se dio.

Múltiples temores al son de los tambores se oyó y el temblor de los hombres al sacrificio movió, de, de aquellos indios agresivos, agrestes, salvajes y semidesnudos sedientos de sangre, quienes vivirían la lucha sin desaliento en la hora

de su última resistencia

La pasión descubridora, que genero consigo la resistencia a la fiereza española, la que el indio recio y duro procuró. Fue tanto por defender su tierra y la existencia de su cultura, como de aquella raza horrenda, de su codicia voraz y asoladora.

El oro, y las inmensas riquezas que habían logrado, de Atahualpa, el País de la Canela, o el Dorado y el oro de Moctezuma, tuvo un afán inesperado, de desventuras y dolor desparramados, pues tuvieron que buscar ayuda en la providencia divina, para no sucumbir al descontento, dolor

y horrenda penumbra

Con la insignia de la cruz en sus manos, pusieron siempre su fe en la lucha, predispuestos a la victoria, promovieron la luz de sus creencias.

De alguna forma el salvajismo de los indios y blancos justificaban su dominación y el exterminio, donde los anglos hicieron estragos.

los testimonios de estos viajeros aventureros, no vieron la luz, de la clara historia de aquella epopeya, donde agresivos indios y españoles perecieron.

La historia de los conquistadores fue escrita con el sacrificio y el silencio de los que nunca volvieron.

Frente a la fiereza española, en una lucha donde lo que precedía era el canibalismo y el salvajismo, muchos perecieron, miles de indios y nobles guerreros en acciones belicosas, pero su fe jamás sucumbió.

Al final la invasion bajo la tenacidad de la conquista reino, y las gestas de aquellos hombres en la historia quedo....

• Los españoles, más volcados en su legado Iberoamericano, no han prestado mucha atención a su pasado.

• Hoy son desconocidos para muchos de ellos, las grandes figuras de aquellos siglos, que hicieron memorable la historia de España.......

Que dominó vastísimos territorios de lo que hoy es, América Latina y los Estados Unidos durante más de tres siglos.

Desde que Colon llego América, hasta Ponce de León quien puso sus pies en la península de Florida en 1513, hasta que en 1821 se arrió la última bandera rojiblanca de la gran nación Ibérica.

Y la posterior hegemonía anglosajona, que eclipsó esa importante parte de la historia norteamericana, donde los españoles, han olvidado su legado Iberoamericano.

Autor: Kenru Castañeda.

 


Conquistadores Castañeda

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